Nutrición saludable - qué afecta la digestión y qué la ayuda
¿Generalmente sufres de dolor abdominal y otros problemas digestivos después de comer? Lo más seguro es que no se trate de una coincidencia. En muchos casos, las dietas poco saludables pueden afectar el tracto digestivo de forma directa y desencadenar molestos síntomas. Es extremadamente incómodo para los afectados, pero hay oportunidad de recuperarse: Se puede influir en la dieta. ¿Qué debes considerar en tu dieta para evitar malestares gastrointestinales? Te explicaremos qué comer para que evites dolores estomacales, la acidez estomacal y otros problemas además de cómo aligerar la digestión.
Por qué puedes llegar a experimentar dolor abdominal después de comer.
Tan pronto terminas de disfrutar esa pizza deliciosa, aparece el primer emisario del molesto dolor abdominal. Mucha gente sufre de malestares gastrointestinales debido a su dieta. ¿Por qué? La explicación es sencilla: Hay dos razones por las que la comida ingerida puede causar dificultades en el estómago e intestino y afectar a tu salud digestiva.
- El tracto digestivo intenta deshacerse de alimentos a los que es sensible tan rápido como sea posible. Los nervios gástricos, por ejemplo, reaccionan de forma sensible a alimentos en descomposición o incompatibles y la transportación de comida se acelera, lo que resulta en dolor abdominal y calambres después de comer, así como náuseas y diarrea.
- Por otro lado, la comida difícil de digerir, como la que es alta en grasas, requiere de un gran esfuerzo y por lo general pasa más tiempo en el estómago e intestino. Durante los procesos de descomposición se producen grandes cantidades de gas que resultan en inflamación, dolor abdominal y una sensación de plenitud que dificulta la vida de los afectados.
Los problemas estomacales resultantes pueden ocurrir ya sea por sí mismos o en conexión con otros desórdenes o enfermedades del tracto digestivo. Por esa razón, la nutrición y salud estomacal son dos cuestiones que van de la mano. Hay enfermedades con un diagnóstico orgánico subyacente y desórdenes gastrointestinales funcionales (FGID, por sus siglas en inglés), en donde hay una causa subyacente diagnosticada. Por lo general, tu dieta también puede desencadenar síntomas gastrointestinales.
Enfermedades gastrointestinales
Se diferencian de los desórdenes del tracto gastrointestinal en el sentido de que hay un diagnóstico de una enfermedad orgánica subyacente; por ejemplo:
- Intolerancia a la lactosa, gluten o fructosa
- Gastritis
- Úlceras estomacales
- Infecciones del tracto gastrointestinal
Desórdenes gastrointestinales funcionales (FGID)
En los desórdenes gastrointestinales funcionales (FGID) no hay causas orgánicas que puedan identificarse como responsables de los síntomas. Sin embargo, pueden ser muy desagradables y afectar en gran medida la vida diaria y a la función estomacal; por ejemplo:
- Estómago irritable/dispepsia funcional (FD, por sus siglas en inglés)
Una serie de malestares que afectan la región superior del abdomen. Hay múltiples causas subyacentes que aún deben ser esclarecidas. La dispepsia funcional sucede en conjunto con otros desórdenes digestivos tales como el SII. Los síntomas incluyen sensación de plenitud, saciedad temprana y dolor en la parte superior del abdomen.
- Síndrome de Intestino Irritable (SII)
Las molestias por lo general se relación con la parte inferior del tracto gastrointestinal. Los malestares frecuentes incluyen dolor abdominal, inflamación y distensión, diarrea o estreñimiento. Se cree que la causa está en la alteración de los movimientos de la musculatura intestinal y la hipersensibilidad de los nervios de los intestinos.
Los siguientes síntomas caracterizan también los desórdenes anteriores:
- Calambres abdominales
Dolor espasmódico o similar a los cólicos en el estómago, pero sin una ubicación específica
- Náuseas
La necesidad de vomitar sin expulsar los contenidos del estómago
- Dolor estomacal
Dolor usualmente ubicado en la parte izquierda del tronco, bajo el diafragma.
- Dolor abdominal
Dolor bajo el esternón.
- Inflamación
La sensación es similar a una congestión alimenticia, pero sin haber consumido alimentos previamente
- Presión abdominal
Según la sensibilidad de los nervios estomacales, puede ser una sensación de plenitud o un dolor severo.
Los hábitos alimenticios pueden desencadenar síntomas de desórdenes funcionales, por lo que un ajuste puede librar a los pacientes de síntomas como el dolor abdominal. La nutrición y la salud estomacal están directamente relacionados. La salud digestiva depende, en gran parte de llevar una dieta saludable y balanceada es buena para la salud en general.
Qué comer en casos de dolor abdominal
Hay varios platillos que traen consigo síntomas gastrointestinales y, por lo tanto, deben evitarse. Asimismo, puedes probar una dieta más ligera y comidas más pequeñas para ver cómo responde tu estómago. Consulta con un médico cualquier cambio a tu dieta.
Los vegetales amables con el estómago son la zanahoria, la calabaza, el brócoli y los chícharos. Por lo general, las frutas maduras como la manzana o el plátano también son bien toleradas. Los síntomas gastrointestinales, tales como el dolor abdominal, pueden desencadenarse con alimentos altos en grasas y en azúcar, comidas que contribuyen a la inflamación (como cebollas o repollo) y estimulantes como el alcohol o la nicotina.
Al hervir los alimentos, no solo se conservan tantos nutrientes como es posible, sino que también se alivia el estómago y los intestinos. De igual modo hay que tomarse el tiempo necesario para masticar lentamente y así reducir el trabajo del estómago.
Para lidiar de forma adecuada con las molestias gastrointestinales, vale la pena confiar en productos médicos que sean bien tolerados. Gracias a la combinación de nueve extractos de plantas medicinales, Iberogast® puede contribuir a relajar los nervios, normalizar los movimientos del tracto gastrointestinal y reducir el dolor y la inflamación.
¿Por qué es importante la nutrición saludable para el bienestar digestivo y qué comidas son buenas para ello?
La forma en que vivimos afecta en gran medida nuestra salud. Un estilo de vida consciente, la actividad física y una dieta saludable pueden tener un efecto positivo en la salud y prevenir enfermedades. Una dieta balanceada es el punto de inicio hacia la digestión regular. La gente por lo general come todo tipo de cosas, postres, harinas, salchichas grasientas y bocadillos fritos, antes que probar un alimento saludable. Por ejemplo, si la comida es baja en fibra, puede causar estreñimiento. Normalmente solo notamos la importancia de una buena digestión cuando el intestino comienza a molestarnos y a mostrarnos síntomas como las náuseas, las flatulencias o la acidez estomacal.
¿Qué es una dieta saludable para el estómago?
Las bacterias en los intestinos son importantes para la salud. Hay comidas que pueden estimular la flora intestinal y alimentos que no solo hacen lo contrario, sino que incluso pueden ser dañinos.
Los siguientes nutrientes le sirven a tu flora intestinal:
Fibra dietética
La fibra dietética se divide en soluble e insoluble en agua. La forma soluble de la fibra dietética se encuentra principalmente en legumbres como frijoles, chícharos o soya, en frutas como chabacano, moras, uvas pasa, vegetales, salvado de avena y cebada. La forma insoluble se encuentra principalmente en productos de trigo integral, vegetales como zanahoria y tomates, frutas como manzanas y plátanos, nueces y semillas. La fibra dietética insoluble no se disuelve en agua.
Se recomienda una mezcla de ambas, ya que le sirve de “alimento” y apoyo a las bacterias intestinales.
Prebióticos
Los prebióticos son un tipo de componentes alimenticios constituidos por fibra de carbohidratos no digeribles. Le sirven a las bacterias intestinales como alimento y así ayudan a mantener la flora intestinal en saludable. Algunas buenas fuentes de prebióticos son la endibia cruda, la alcachofa, los plátanos y las comidas ricas en fibra, como el centeno.
Probióticos
A diferencias de los prebióticos, los probióticos son microorganismos vivos. Ayudan a procesar la comida en el estómago. En estudios experimentales, algunos probióticos mostraron potencial como reguladores de la sensación de dolor de los nervios gastrointestinales de los pacientes con SII.
Los investigadores aún tratan de determinar cuáles funcionan para ciertos malestares, pero los primeros resultados son prometedores: Los “lactobacilos”, que se encuentran en el yogurt y otros alimentos fermentados, pueden ayudar con la diarrea, mientras que las bifidobacterias, que se ubican en productos lácteos, ayudan a aliviar los síntomas del Síndrome de Intestino Irritable (SII) y algunas otras condiciones.
Alimentos con los que se debe tener cuidado
Hay alimentos que no necesariamente dañan la flora intestinal, pero que tampoco la benefician. En general, se debe limitar la ingesta de los siguientes nutrientes:
Comidas con un efecto posible en el estómago
Hablamos de comidas de tiendas de conveniencia, golosinas, carnes ahumadas y curadas. Las sales usadas en estos alimentos procesados pueden irritar la mucosa gastrointestinal. A esto nos referimos cuando decimos que la nutrición y la salud estomacal están directamente relacionados.
FODMAPs
Azúcares de cadena corta que no se absorben bien en el intestino delgado pero que se fermentan rápidamente con el microbioma intestinal. Ya que estos carbohidratos llevan más agua al intestino, las personas con SII pueden llegar a experimentar más gas, inflamación y diarrea después de consumirlos. Si sufres de intestino irritable, quizá valga la pena considerar una dieta FODMAP a corto plazo con tu médico.
Comidas con mala reputación
Grasas malas
Son ácidos de grasa saturada, como los encontrados en la mantequilla, grasa para freír, manteca o aceite de coco. Hay una relación causal entre el aumento en la ingesta de grasa y los problemas cardíacos.
Harina blanca
La encontramos en nuestros postres favoritos, como pasteles, dulces, cuernitos y pan blanco. Estas comidas son bajas en fibra dietética, que le sirve a las bacterias del estómago.
Comida de tiendas de conveniencia
La comida procesada normalmente contiene grasas duras, azúcares ocultos y muchos aditivos que resultan pesados para el intestino y el sistema inmunológico.
¿Nutrición saludable? Se siente bien ¡y sabe bien!
La nutrición saludable y digestiva no excluye los platillos sabrosos. Mientras la dieta sea balanceada y esté bien combinada, es buena para ti. Si tu comida es rica en fibra y cocinada con ingredientes altos en vitaminas y minerales, ¡ya estás en camino hacia la mejora de tu digestión y bienestar!
Es muy importante ser versátil. Una dieta saludable no significa comer únicamente frutas y vegetales. Dale prioridad a los vegetales, pero recuerda cambiar los ingredientes de vez en cuando. Esto garantiza una dieta balanceada y saludable.
Además, al incluir carbohidratos como pan, pasta o arroz, hay que enfocarse en que sean integrales. Esto aumenta la cantidad de fibra en tu dieta (ver arriba).
De igual modo, trata de escoger las grasas de forma consciente y usa grasas vegetales, como el aceite de canola. Trata de evitar grasas ocultas y consume azúcar y sal en forma moderada y conseguirás mejorar tu salud digestiva. .
Aquí hay un par de sugerencias de ingredientes fácilmente digeribles para lograr una dieta saludable:
- Risotto de trigo con pimentón, calabacita y arúgula al vapor.
- Ensalada de alubias con pollo rostizado
- Salmón con ensalada de maíz y betabel al vapor
Hazte un favor y mejora tu digestión al comer lo siguiente:
- Piñas
- Manzanas
- Alcachofas
- Aguacates
- Plátanos
- Papas
- Productos lácteos acidificados
- Hinojo
Tómate tu tiempo y aprovecha al máximo la nutrición saludable
Para controlar algunos problemas digestivos e incrementar el bienestar del sistema digestivo, además de las sugerencias de nutrición antes mencionadas, hay que reducir el estrés y comer de forma regular sin presiones de tiempo y con suficiente consumo de líquidos. Trata de incorporar los siguientes consejos en tu vida diaria:
- Bebe suficientes líquidos
- Come de forma balanceada
- Mastica lento
- Establece ritmos y rutinas
- Muévete lo suficiente
Un primer paso en el apoyo nutricional
El tratamiento de desórdenes gastrointestinales funcionales como el SII se vuelve posible con productos como el nuevo Iberogast®.
Sin embargo, los hábitos alimenticios poco saludables en combinación con la falta de actividad física pueden desencadenar síntomas como dolor abdominal y hábitos intestinales atípicos (náuseas, acidez estomacal…). Cambiar estos factores puede resultar en una mejora considerable de la calidad de vida y productividad de los pacientes. Para ayudarte con el primer paso hacia un estómago más saludable, hemos compilado la siguiente información:
Incluye datos sobre los distintos grupos de alimentos, su efecto en la digestión y cómo influyen en los síntomas de intestino irritable. Te ayudará mediante un plan alimenticio de muestra para una semana, un panorama general del contenido de fibra según el tipo de comida y una pirámide alimenticia, que podrás usar para preparar tu propio plan de alimentación semanal.
Momentos de estrés
El estrés en el trabajo es parte de la vida diaria de muchas personas. En dichas situaciones, un cambio pequeño, como una burbuja de gas, puede hacer que la persona se sienta mucho peor cuando está estresada o agotada. Esto no solo causa problemas psicológicos como el agotamiento, sino que también puede afectar al tracto gastrointestinal.
Iberogast®
Las irregularidades en el tracto gastrointestinal no sólo son extremadamente molestas, sino que se asocian a una variedad de malestares y hacen que la vida cotidiana sea más difícil. ¡Qué bueno que hay Iberogast®! La combinación de nueve plantas medicinales alivia las causas subyacentes y los molestos síntomas.